Siempre te negaste al bautizo
del arbol de durazno
siempre para mi tuvo tu nombre
por el aroma de sus frutos
tu dulzura
el terciopelo de tu piel
y el recuerdo que creceria en cada micra
de su tronco
hoy sus yemas se tranformaron en rosados
los tucusitos libaron su miel
que es la tuya
y cuajaron los frutos
los primeros
que como este verso
estan dedicados a ti